VALIDACIÓN MÉDICA
Esta receta cumple con los lineamientos de:
World Gastroenterology Organisation.
Nota Importante: Aumentar fibra gradualmente para evitar gases.
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Generar Receta Disponible en plan Básico y Premium AI🥕 Ingredientes
- 4 chuletas de cordero (aproximadamente 150g cada una, magras)
- 200g de rúcula fresca
- 2 calabacines medianos, cortados en dados
- 1 pimiento rojo, cortado en dados
- 1 cebolla roja, en rodajas finas
- 2 zanahorias, cortadas en rodajas
- 2 dientes de ajo, picados
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharadita de romero seco
- Sal y pimienta negra al gusto
- Para la salsa hidratante: 1 taza de caldo de verduras bajo en sodio, 1 cucharada de vinagre de sidra, 1 cucharadita de mostaza de Dijon
- Acompañamiento recomendado: 1 vaso de agua (250ml) para consumir con la comida
🔥 Preparación
- Precaliente el horno a 200°C (400°F). En un tazón grande, mezcle los calabacines, el pimiento rojo, la cebolla roja, las zanahorias y el ajo con 1 cucharada de aceite de oliva, romero, sal y pimienta. Extienda sobre una bandeja de horno y ase durante 25-30 minutos hasta que las verduras estén tiernas y ligeramente doradas.
- Mientras tanto, sazone las chuletas de cordero con sal y pimienta. En una sartén a fuego medio-alto, caliente 1 cucharada de aceite de oliva y cocine las chuletas durante 4-5 minutos por cada lado hasta que estén bien cocidas pero aún jugosas. Reserve.
- Para la salsa hidratante, en una cacerola pequeña, lleve a ebullición el caldo de verduras, el vinagre de sidra y la mostaza de Dijon. Reduzca el fuego y deje hervir a fuego lento durante 5 minutos hasta que la salsa espese ligeramente.
- En cada plato, coloque una capa de rúcula fresca. Añada las verduras asadas encima. Coloque una chuleta de cordero al lado. Rocie ligeramente con la salsa hidratante.
- Sirva inmediatamente con un vaso de agua para alcanzar el objetivo de hidratación forzada. Consuma esta comida como parte de una dieta diaria que incluya al menos 2L de líquidos.